Enfrentar una crisis de pánico, no es tarea sencilla, si bien se aconseja muchas cosas que puede llegar a calmarnos, en el momento que la experimentamos es realmente difícil y se piensa que no saldremos vivos de esa situación tan aterradora.
Hay instancias en que las crisis de pánico son más intensas e incluso con nuevos síntomas, pensamos en ese momento que puede ser un ataque fulminante en el corazón, o que talvez hemos perdido la razón, pero lo que realmente es certero, que para la persona que lo vive resulta ser una situación tan desgastante y espantosa, que ni a nuestro peor enemigo se la daríamos.
LA PRIMERA VEZ QUE VIVÍ UNA CRISIS DE PÁNICO
La primera vez que vi de lejos la crisis de pánico, fue cuando mi mama la sufría, realmente me apenaba mucho cuando tenía esos cuadros, pero si bien empatizaba con ella, no lograba dimensionar que tan terrible era, ella muchas veces me explicaba lo que sentía, o las veces que quería salir arrancando de un lugar sin razón aparente, sonaba bastante mal, y la veía muy desconcertada también durante y después de la crisis,
me entristecía mucho verla así, pero no comprendía del todo que era la crisis de pánico, y pensé que a mi jamás me daría algo así, hasta ese entonces a mis 25 años de edad nunca experimente algo así, solo lo vi en personas muy cercanas a mí, y muy queridas también …
hasta que llego el día que no solo vi la crisis de pánico de lejos, sino que entro a mi vida en el momento más doloroso, que fue cuando mi mamá falleció de cáncer, ese día mi vida cambio para siempre, no solo por la gran perdida y por el dolor inmenso que sufrí, sino también porque viví en carne propia lo que era para mi tan lejano como la crisis de pánico.
El día en que falleció mi mamá estaba completamente devastada, creo que por mucho que te traten de «preparar» para la muerte de un ser querido, jamás te podrás preparar para algo así, ni menos si alguien al cual amas tanto como yo amaba a mi madre, si bien sabía que en cualquier momento ella moriría, producto del cáncer que le quejaba, nunca acepté, ni mucho menos me preparé para que llegara ese día.
El 31 de marzo del 2015…
una parte de mi murió y la otra se fue con ella, ese momento fue el inicio de muchos cambios que jamás pensé que experimentaría, sensaciones y síntomas que eran totalmente desconocidos para mí,
llegaron a quedarse en mi vida, y ese momento fue el inicio de todo, por primera sentí que era una crisis de pánico, mi corazón estaba a punto de reventarse, mis brazos, mis piernas estaban adormecidas, solo sentía muy poco y eso me provocaba aún más ansiedad, pensar que podía no llegar a sentir mis extremidades nunca más …
La sensación de ahogo constante, como si me faltara el aire, sentía una opresión en el pecho, como si me estuviera ahogando, fue tan desesperante la primera vez, porque uno sabe que algo muy malo te está pasando, pero no sabes que es, piensas que en cualquier momento te puedes morir y no sabes ni cómo ni cuándo va a parar esas sensaciones horribles que recorren todo tu mente y cuerpo.
Recuerdo también que ese día me sentía tan vulnerable, y comencé a activar mi modo de supervivencia, una ansiedad horrible que me hacía desconfiar de absolutamente todos los que estaban cerca, menos de mi padre en ese entonces, francamente son muchas sensaciones juntas que por un minuto piensas que vas a perder el juicio y no sabes cómo detener tu mente, no sabes cómo detener todo eso …
Ese día me tuvieron que llevar al hospital de urgencia, por que como yo no sabía que es lo que me estaba pasando, todas las personas que estaban conmigo ese día quedaron muy asustadas con lo que me estaba ocurriendo,
así es que fué en el hospital después de varios exámenes que descartaron alguna dolencia en el corazón, en la cabeza o en los pulmones, fue ahí cuando le dijeron a mi papá que yo había sufrido un colapso tan grande por la muerte de mi mama, y que producto de eso estaba viviendo una gran crisis de pánico.
LA PRIMERA CRISIS DE PÁNICO ES DESECANDENANTE DE MUCHAS CRISIS MÁS …
Pensé que después de ese momento tan malo que pasé ese día, jamás iba a experimentar otra crisis de pánico, pensé que eso había sido solo un mal momento y que no ocurriría más … pero no fué así, escuche muchas veces que después de la primera crisis de pánico que sufres, te vuelves mucho más propenso/a a sufrir nuevos episodios similares o incluso más grandes, prácticamente nos volvemos un poco más vulnerables a estas crisis, y se pueden parte de nuestra vida cotidiana….
así me paso a mí, si bien no fueron tan recurrentes, de igual manera cada cierto tiempo volvía la crisis de pánico y se manifestaba con los mismos síntomas que tuve ese día, pese a que ya sabía en ese entonces lo que me ocurría, no sabía aun como detenerla, afortunadamente casi siempre cuando las he tenido, he podido pedir ayuda a alguien cercano,
pero otras tantas veces me encontraba en la calle sola y me venía esa crisis espantosa, pero trataba de no resistirme a los síntomas, porque entre más me resistía más y más se intensificaban,
de eso si pude darme cuenta de todas las veces que me han dado las crisis de pánico, es por eso que quiero dejarles algunos consejitos para que puedan controlarse y lograr que los síntomas del ataque de pánico en ese momento se disipen de la mejor manera, sin que sea tan traumática la experiencia.
ESTRATEGIAS PARA ENFRENTAR UNA CRISIS DE PÁNICO
Una crisis de pánico sin duda puede ser una experiencia muy aterradora, paralizante, y realmente desgastante, pero te quiero dejar los tips que me han ayudado a mi afrontar esta situación de la mejor manera posible sin tener que tomar medicamentos:
1- Primero que todo, lo que me ha ayudado a mí, es el hecho de no resistirme a los síntomas que conlleva la crisis de pánico, al igual que la ansiedad, los síntomas como llegan se van, pero para que esta experiencia no sea tan traumante y abrumadora es mejor no colocar resistencia, porque los síntomas empeoran,
te invade la ansiedad de querer que eso se pase lo más rápido posible, y suele pasar el efecto inverso, si resistes a sentir esas sensaciones mucho menos se irán,
en cambio, si te relajas dentro del miedo que sientes y haces el ejercicio de la «rendición» y soltar, es como sentirte bien en medio de la catástrofe, sé que suena loco, pero te juro que se puede, es solo dejarte llevar, sin resistirte a que los síntomas lleguen y saber que están ahí, pero también tener presente que solo tienes que esperar que estos pasen, y se irán.
2- Practica la respiración profunda, inhalar por la nariz y exhalar por la boca de manera constante y profunda, hace que el sistema nervioso se calme, se oxigena el cerebro y reduce de gran manera la tensión muscular.
3- Lo otro que ayuda bastante, pero al menos a mí me ha costado un poco ser constante, es el hecho de hacer ejercicio regularmente, y no te digo que solo yendo a un gimnasio te hará sentir mejor, no, el ejercicio involucra, del simple hecho de caminar por el aire libre, andar en bicicleta, bailar, salir a correr, o practicar deporte en tu casa,
lo importante es mantenerse en movimiento todos los días, ya que el ejercicio físico libera endorfinas que te hace sentir bien y te ayuda a despejar la mente, no solo es para verte bien físicamente, también se práctica para estar bien mentalmente, es por eso que es tan importante …
4- Otro de los tips que te recomendaría hacer es identificar y cuestionar tus pensamientos, ya que a menudo los pensamientos negativos y exagerados pueden ser detonantes de las crisis de pánico,
es por eso que es imprescindible que identifiques tus pensamientos y cuestiones su validez, trates de limpiar tu mente de la negatividad, distrayéndote en actividades placenteras, y juntándote con personas que te hagan sentir bien y que por supuesto no sean negativas …
5- Haciendo hincapié al punto anterior, seria de mucha ayuda que hablaras con alguien acerca de lo que te pasa, de las crisis de pánico, alguien que te inspire confianza, un amigo o un familiar y si no tienes con quien hablar de estos temas sería bueno que fueras a alguna terapia para que un profesional te pueda ayudar y orientar de mejor manera.
6- Haz algo que te guste y lo disfrutes, sea lo que sea lo que te guste hacer es importante que no lo dejes de lado, dedica tiempo a hacer actividades entretenidas, dinámicas, algo que te apasione, para que tu mente se acostumbre a los momentos placenteros.
7- Lo otro que me ha servido bastante es la meditación , no hay que ser un una especie de zen para meditar , simplemente es colocarse en un lugar cómodo , con una música que te relaje , cerrar los ojos , respirar profundamente , mientras te visualizas en un viaje hacia tu lugar favorito , hacia tu sitio ideal , proyectando pensamientos agradables , sé que puede ser muy difícil al principio , lo sé , porque a cada momento los pensamientos negativos quieren tomar protagonismo , y es cosa de practica alejar esos pensamientos y reemplazarlos por unos mejores .
Lo importante es que trates de practicar alguna técnica de relajación que a ti te funcione, como puede ser la meditación como te mencionaba, yoga, pilates, o la progresiva relajación muscular, entre más practiques día a día, más controlada tendrás la ansiedad y por supuesto que se desencadene una nueva crisis de pánico.
8- Si consideras que nada de esto te funciona del todo y la ansiedad y las crisis de pánico interfieren en tu vida diaria, que no te dejan desenvolverte y vivir bien, entonces lo más recomendable es que pidas ayuda médica, habla con tu medico de las alternativas de tratamiento que tienen para ti, si es necesario la medicación,
lo importante es que no vivas solo o sola este proceso, si necesitas ayuda pídela, somos muchas las personas que vivimos con estas crisis, recuerda que no eres el único/a que lucha con la ansiedad y las crisis de pánico, somos muchos,
y lo importante es apoyarnos, y si se va a de las manos y sientes que las crisis de pánico domina tu vida, no olvides que siempre habrá tratamientos efectivos disponibles, no dudes en buscar ayuda profesional si sientes que no puedes más …
Te mando un abrazo grande, espero poder haberte ayudado, gracias por leerme …
Cuida tu mente, al igual que cuidamos nuestro cuerpo de alimentos tóxicos, también deberíamos darle aún más importancia a que tipo de pensamiento está entrando en nuestra mente, lo más importante es estar bien mentalmente para que todo nuestro organismo funcione correctamente y así podamos sentir que estar vivos vale la pena y llegar algún día a ser completamente felices…