Cuando comencé a amarme de verdad
, comprendí que en cualquier circunstancia, yo estaba en el lugar correcto, en la hora correcta y en el momento exacto .
Entonces pude relajarme. Hoy sé que eso tiene un nombre y se llama “AUTOESTIMA“.
Cuando me amé de verdad, dejé de desear que mi vida fuera diferente, y comencé a aceptar todo lo que acontece y que contribuye a mi crecimiento. Eso se llama “MADUREZ“.
Cuando me amé de verdad
, comencé a librarme de todo lo que no fuese saludable : personas, situaciones , todo y cualquier cosa que me empujara hacia abajo.
Al principio, mi razón llamó “egoísmo” a esa actitud. Hoy sé que se llama "AMOR HACIA UNO MISMO"
Cuando me amé de verdad, desistí de quedar reviviendo el pasado y preocuparme por el futuro.
Ahora me mantengo en el presente, que es donde la vida acontece. Hoy vivo un dia a la vez. Y eso se llama “PLENITUD“
Cuando me amé de verdad, comprendí que mi mente puede atormentarme y decepcionarme.
Pero cuando yo la coloco al servicio de mi corazón , es una valiosa aliada. ¡Y eso se llama “SABER VIVIR”!
No debemos tener miedo a cuestionarnos o afrontarnos. De hecho , hasta los planetas chocan y del caos suelen nacer la mayoría de las estrellas que vemos en el universo.
